Mires donde mires, encuentras plástico excesivo por todas partes. Desde un supermercado que envasa las mandarinas por unidades hasta una oficina donde los trabajadores beben agua en vasos de plástico.
Durante años hemos visto cuánto plástico es capaz de generar un festival de música donde miles de personas beben cerveza en vasos de plástico. Nosotros hemos querido hacer algo al respecto.
El vaso que ves en la imagen parece de plástico, pero es biodegradable y se tira al contenedor orgánico. Con la ayuda de Estrella Damm, el Cruïlla 2018 fue el primer festival de gran formato con vasos 100% biodegradables. En 2019 lo volvimos a hacer, y el Bio-Vaso ya funciona en todos los conciertos de Cruïlla de Primavera y Cruïlla de Tardor.
En 2020 el Bio-Vaso volverá al Cruïlla. Pero no nos conformamos y ahora trabajamos con un nuevo objetivo:
Queremos un festival totalmente libre de plásticos
Construir el Cruïlla significa levantar una pequeña ciudad dentro de la ciudad, en un lugar donde previamente no había nada. Para hacerlo empleamos todo tipo de materiales desechables que tienen una vida efímera.
Queremos ser un festival que reduzca su impacto ambiental a la mínima expresión y esto implica la colaboración de todas las entidades presentes en el festival.
Por otro lado, el uso del bio-vaso también implica tu ayuda, porque los vasos biodegradables se tienen que tirar a los contenedores orgánicos. Solo a través de un proceso de compostaje industrial los vasos volverán a la tierra.
Ya somos un referente en respeto medioambiental. Queremos ser pioneros en reducir el plástico de nuestro festival a cero. ¿Nos ayudas?